Fundación l Fernando Foglino

Setiembre 2024 - Marzo 2025

Cuando la Policía exhibe a la prensa lo que ha incautado en un operativo, cuando ordena y distribuye los objetos sobre una mesa para que todo quede a la vista, está haciendo énfasis en la presencia, en lo recuperado, en lo que antes estaba oculto. En cambio, cuando los mismos objetos son exhibidos en una Sala de Exposiciones lo que se muestra es la ausencia.

Dice Ticio Escobar en Practicas de frontera (2015): “solo lo poesía puede hablar a través de lo que calla, puede señalar ocultando.”

El pasado 24 de octubre, los floridenses amanecieron con la noticia de la desaparición de la escultura de bronce conocida como la Loba Capitolina, quedando en la plaza solamente los bebés Rómulo y Remo con sus manos en alto y las bocas abiertas. Días más tarde la Loba, trozada en 18 partes, prontas para su comercialización al peso, fue recuperada.

El monumento símbolo de Roma, la ciudad por antonomasia (la Urbe y la Città Eterna), se presenta tal y como fue encontrado después de su desaparición, en el edificio más antiguo de Montevideo, como fósiles futuros, la sombra de algo que ya ha desaparecido.

Leonard Cohen le comenta a un amigo en un cuarto de hotel: “En realidad, ya no queda nada, ninguna civilización, ningún arte… La mayoría de nosotros vive en ciudades que ya no existen más que como atascos de tráfico. Atenas, Nueva York, París, Barcelona, son ciudades míticas que ya no existen. Todos vivimos en esa pequeña área que rodea a la catedral, pero ahora eso no es más que una atracción turística.”

Fernando Foglino

Agradecimientos:
Marcos Pérez y Guillermo Montaño, Intendencia de Florida

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