Viajeros, marinos y migrantes - Artista invitada: Agustina Villar
Mayo - Noviembre 2024. Apoya: Xunta de Galicia - Delegación en Montevideo
La construcción de narrativas es inherente al quehacer museal; el análisis de las piezas del acervo propicia relecturas, potenciando su capacidad poética y simbólica. Sentir y reflexionar una historia que excede los 300 años, nos invita a transitar distintas coordenadas, incluyendo las de los dibujantes y acuarelistas viajeros, que imprimieron visiones casi etnológicas de nuestro territorio, sus habitantes y los paisajes culturales que conformaron.
¿Cómo nos veían y cómo nos veíamos?, ¿qué relatos se construyeron?, ¿cuánto afectó esa hegemonía eurocéntrica nuestro imaginario colectivo?,¿cómo influyó la mirada de esos artistas en la construcción de la iconografía local y la propia identidad?.
Viajeros, marinos y migrantes, presenta obras de Emeric Essex Vidal, quien entre 1816 y 1818, realizó numerosas acuarelas del Plata, con detallados apuntes y notas descriptivas al dorso; Jean Baptiste Debret, quien viajó por nuestro continente hacia 1816 y cuya obra es testimonio de la construcción de un imaginario de estereotipos que constituyen un espejo distorsionado en el cual identificar paisajes y habitantes. Conrad Martens. que integró la expedición del Beagle, arribó a Montevideo en 1832 y nos dejó también una serie de bocetos y acuarelas de la ciudad y sus alrededores. Adolphe D´Hastrel, quien hacia 1845 dejó sus impresiones de Montevideo, su paisaje, costumbres y cotidianeidad en el Álbum del Plata, y Johann Moritz Rugendas, quien llegó en plena Guerra Grande y cuya producción se conforma por cientos de dibujos, acuarelas y varios óleos, en los que el artista procuró captar a los soldados, legionarios y gauchos que entonces recorrían la ciudad y sus alrededores. También se exhiben de forma excepcional, obras del acervo de la Xunta de Galicia en Montevideo, entre las que se destaca la Escena de Campo de Manuel Colmeiro.
Las cartografías de quienes habitaron el territorio a lo largo de la historia y las de quienes arribaron en las distintas oleadas migratorias, incluyen sin dudas multiplicidad de rutas, derroteros y puntos de partida. El foco aquí, está puesto por un lado en la representación y sus implicancias, y por otro, en las distintas capas y campos sensibles que hacen a la construcción de nuestra identidad.
Lic. Rosana Carrete
Directora
Museo Histórico Cabildo
Nos queremos mucho, ¿verdad que sí?
Mediante la práctica del bordado y la costura, investigo temáticas como la familia, la migración y las distancias. La intención, es reflexionar sobre la construcción de nuestra memoria personal y colectiva, así como la capacidad de tejer recuerdos y rescatarlos de la oscuridad.
En la presente propuesta, focalizo en el bordado de frases extraídas de más de cien postales, enviadas entre 1975 y 2000 por mis abuelos maternos y mi tía desde España a mis padres, a mí y a mis hermanos en Uruguay. Estas frases se plasman en carpetas hechas a mano, traídas por mi abuela paterna desde un pequeño pueblo de Galicia, de donde proviene mi familia.
Las postales originales están conectadas con la obra, reactivando de alguna manera el tránsito y uniendo estos archivos que testimonian un diálogo a la distancia.
El acto de bordar y coser, no es solo una forma de perforar la tela, sino también de reparar y unir. El hilo rojo se convierte en una metáfora poderosa de la conexión sanguínea y las tramas familiares.
Este trabajo explora la migración y las formas en que somos afectados por el desarraigo. El proceso de releer, reflexionar y accionar sobre estos archivos personales, abre un diálogo, un permiso para revisar y acortar distancias. Es una exploración de las múltiples facetas de la experiencia humana, a través del prisma de las migraciones, la memoria y la familia.
Agustina Villar
Homenaje a las ancestralidades de nuestra sociedad
En las tierras que abrazan al Río de la Plata se encuentra la ciudad de Montevideo. El territorio donde se asienta ha sido testigo de innumerables historias de migración y movilidades forzadas que han dejado una marca profunda en nuestro tejido social, a la vez que han dado forma a la ciudad y modelado nuestra cultura. Nuestra sociedad es un tapiz tejido con hilos de antiguos y modernos tiempos. Sus raíces se entrelazan en un lienzo de historias entrecruzadas, donde el relato de su origen se dibuja en capas superpuestas de dolor y resistencia, y de esperanzas y sueños.
Hace tres siglos, la ciudad comenzó su danza de piedra y mar, cuando el eco de los barcos europeos resonó en sus costas, trayendo consigo no solo rostros desconocidos, sino también un torbellino de destinos entrelazados. La inmigración euroatlántica tejió sus sueños en el tejido urbano, marcando calles con nombres de lugares, personas y dioses lejanos.
En esa danza de sueños también se entretejieron las sombras de la tragedia. Las olas de la movilidad forzada trajeron a Montevideo susurros y voces de sufrimiento, cuando pueblos africanos fueron arrancados de sus hogares y depositados en tierras lejanas. Sus manos construyeron la ciudad, sus lágrimas regaron sus cimientos, mientras sus canciones se mezclaban con el viento, buscando el eco de la libertad perdida.
Y en esa misma tierra fecunda, se escribió con sangre un capítulo oscuro de esclavitud. Los pueblos originarios, guardianes ancestrales de esta tierra, fueron masacrados y sometidos a cadenas y grilletes, obligados a trabajar en las sombras de la opresión. Sus espíritus y sus voces hoy se levantan en resistencia, tejiendo memorias de valor y dignidad en la trama de una ciudad en constante transformación.
Montevideo, con su antigua muralla, es testigo mudo de un pasado tumultuoso, donde las voces de aquellos que fueron silenciados buscan aún ser escuchadas. En cada esquina, en cada susurro del viento, se entreteje la memoria colectiva de un territorio que guarda en sus entrañas las cicatrices de su historia, esperando ser sanadas con la luz de la verdad y la justicia.
Luis Bergatta
Museo de las Migraciones / Complejo Cultural / Área Arqueológica