Historia
El Cabildo de Montevideo fue protagonista de importantes acontecimientos políticos, sociales y culturales durante los siglos, XVIII XIX y XX.
El 1º de enero de 1730, día de la fundación jurídica de la ciudad, Don Bruno Mauricio de Zabala señalaba como sede del ayuntamiento, la casa del Capitán Pedro Gronardo, construida en piedra, barro y techo de cuero. En 1737, ante la precariedad de dicho edificio, se decidió construir uno nuevo, en las actuales calles Juan Carlos Gómez y Sarandí.
El incesante y continuo desarrollo comercial de Montevideo en ese fin de siglo, contribuyó a que la ciudad experimentara una serie de cambios urbanísticos y edilicios, resolviendo las autoridades de la época, la construcción de una sede más importante. Hacia 1803, el gobierno de la ciudad, decidió demoler la vieja edificación y según el proyecto original del Maestro Tomás Toribio, se construyó con sólidas paredes de sillares de piedra, la sede definitiva del Cabildo de Montevideo y Reales Cárceles.
El Cabildo, que albergó en un principio funciones administrativas, judiciales y dependencias carcelarias, como lo establecía la Legislación de Indias, se constituyó en un emblema de Montevideo; por casi cien años fue el reducto del primer gobierno comunal de la ciudad y en sus salas se sancionó y juró un 18 de julio de 1830 la primer Constitución de la República, funcionando posteriormente el Poder Legislativo y el Ministerio de Relaciones Exteriores, entre otras instituciones.
El Museo nació un 25 de agosto de 1915 por iniciativa de Alberto Goméz Ruano, ubicándose en la ex Quinta de Sierra, en Camino Castro y Molinos de Raffo. Fallecido Gómez Ruano se designó como director honorario a Horacio Arredondo, quien a lo largo de 30 años realizó una labor histórica y antropológica que se reflejó en el acervo adquirido, por donación, o compra de objetos de la más variada naturaleza: pinturas, dibujos, acuarelas, litografías, grabados, mobiliario, textiles,alfarería y cerámica; con el objetivo de construir una narrativa en torno a la vida y evolución de la ciudad de Montevideo, así como sus usos y costumbres.
Cuando el edificio del Cabildo pasó a la órbita municipal, se definió el traslado del acervo antes mencionado a este edificio, siendo inaugurado un 21 de setiembre de 1958, el Museo y Archivo Histórico Municipal, hoy Museo Histórico Cabildo.
Actualmente, la programación del museo integra diversas voces; las disonancias promueven tensiones que movilizan cuestionamientos, los discursos se vuelven porosos dejando pequeñas brechas por donde asoman otras narrativas transitorias.